Thursday, April 26, 2007

Family - Un soplo en el corazon

El disco de Family es uno de los más lindos que escuché.

Emparentado con el indie inglés de los ochentas (New Order, Smiths, Field Mice), tiene un sonido bastante diferente al de sus coetáneos españoles: guitarras jangly (si a alguien se le ocurre su equivalente en español, dígamelo), bajos saltarines y ritmos programados.

Me gusta particularmente su forma de escribir letras: la mayoría de veces las rimas son asonantes, o no existen. Sus canciones son pequeñas viñetas que buscan encontrar en los pequeños detalles la dulzura y la melancolía de la vida:

La noche inventada: Las primeras líneas de la canción resumen, para mí, lo que Family busca hacer en todo el disco: Miramos aburridos por el ventanal, para inventar otra vida en la misma ciudad.

Nadadora: Probablemente la canción más conocida del grupo. Me recuerda, por temática, a Girl Afraid de The Smiths.

Como un aviador: Inmediatamente me hace pensar en la pista de baile: el bajo, los efectitos que suenan como los que vienen en los teclados casio, la programación, la guitarra entrando al final para reforzarlo todo.

En el rascacielos: Personalmente, y es muy probable que sea porque está entre dos canciones que me encantan, está canción no me gusta mucho. Si hubiera estado en algún otro lugar del disco, es posible que pudiese apreciar más su arreglo tan melancólico.

El bello verano: (tengo ganas)... de soñar el verano en el que fuimos novios, y poderle cambiar el final

Portugal: Me recuerda un día feliz en la playa, la camisa grande y el pelo largo, a media tarde.

El Buen Vigía: La guitarra suena como si alguien estuviera sacudiendo tejida de metal. Otro de sus momentos capturados: un boulevard al lado de la playa, un día de verano. Tal vez del mismo verano.

Viaje a los sueños polares: La canción más pop de un disco pop. Por los arreglos, los acordes, la melodía, el uso de un estribillo. Ya despegamos del cuarto, ahora estamos recorriendo lo que siempre esperabamos encontrar afuera.

Al otro lado: Este es el problema de irse: siempre queda alguien atrás, así no lo creamos, siempre hay alguien que sentirá la partida. Al menos esta canción es optimista. Como si fuera un padre o un hermano mayor el que nos despide. O un abuelo diciendo adiós.

Carlos baila: Otro de los temas discotequeros, y otra de las observaciones de una tercera persona. Es como si se hubieran propuesto encontrar la melancolía en los terceros. En una piscina, en una pista de baile. Tal vez es que hay personas a las que la melancolía los persigue.

Yo te perdí una tarde de abril: Es la primera canción de un díptico que habla del amor. Esta habla de la pérdida. Me encanta como absolutamente ninguno de los pareados rima. Y como resume el ya no estar juntos: tu risa ya no está con mi risa.

Dame estrellas o limones: La canción de amor más bonita que conozco.

El mapa: Cuando ya han empezado el viaje, repentinamente se dan cuenta que no todo es tan fácil como se pensaba, que los planes van cambiando, y ahora se añora la casa y su rutina tan cálida.

Martín se ha ido para siempre: De nuevo los efectos de casio son lo más notorio de esta canción. Family se despide con una canción de despedida. De alguna forma, es como si su viaje ya hubiese terminado, y viesen a alguien más joven e inexperto que ellos desesperándose por partir, y no pudiesen hacer nada para evitarle los sinsabores que le esperan en el camino. Sólo pueden decirle que se cuide, y desearle que las alegrías le valgan todas las penas.

Un soplo en el corazón

Watanabe

Ayer murió Watanabe mientras yo hablaba de él, como en un cuento de Marías. Hablabamos de poetas, de Vallejo y de Oquendo de Amat. Y Matías mencionó a Watanabe. Y luego Watanabe ha muerto, mientras hablabamos de él.

Inevitablemente, pienso en piedras. Redondas y humedecidas por la corriente; esperando tanto tiempo. Ahora han alzado vuelo.

Wednesday, April 25, 2007

Sigo vivo

Publicar es mucho más difícil de lo que quisiera. Pero sigo vivo. Pronto algún post.