La felicidad es un concierto de rock.
Ayer, decepcionado por mi enésima oportunidad perdida (todas las entradas para ver a The Cure (que toca en ¡¡¡marzo!!!) están agotadas), decidí darle una prueba a Enon, de quienes nunca había escuchado nada, y, por ende, a The Garage.
El motivo por el que no había ido antes a los conciertos de esa sala es porque The Garage queda en el culo del mundo. Oficialmente ya no es Milán, es otra ciudad, Sesto San Giovanni. Y no quería verme en la situación de perder el último metro y quedarme ahí parado hasta las 6 de la mañana, o caminar casi dos horas con el frío que hace ahora acá.
O, en el peor de los casos, salirme antes del concierto y haber pagado X euros por gusto.
Pero ayer fuí. Y todo salió bien (aunque mal restrospectivamente, más detalles luego).
Resulta que los conciertos que se organizan en el local son gratis. Gratis. Solamente tienes que sacar la tarjeta de socio (que cuesta 5 euros por un año) y voila, conciertos gratis.
Eso significa (y Amadeo me va a odiar por esto) que podría haber visto a The Future of the Left... gratis.
Pero bueno, como dice un grande, "ya lo pasado, pasado". A lo mejor en enero y febrero puedo ver algún grupo que valga la pena.
(Por lo pronto me perderé a las Plasticines el 20, porque tengo que tomar el avión para pasar Navidad en Barcelona).
¿Qué tal el concierto? A mí me gustó mucho. No sabía nada de Enon, pero en estos tiempos del conocimiento instantáneo solo tienes que buscar en Wikipedia y You Tube para tener todos los datos que necesitas. Y cualquier reseña/descripción que contenga las palabras ruido y melodía ya tiene ganada la mitad de mi atención.
Las canciones (al menos las que tocaron, he visto en You Tube que a veces hacen cosas completamente diferentes) están ancladas en la base rítmica (Toko Yasuda toca increíblemente bien el bajo), mientras que la guitarra toca ráfagas de ruido procesadas.
Si bien en algunas canciones se les notaba la deuda con el punk old-school (más bien el indie ochentero), lo que más destacó fueron las preciosas melodías vocales de Yasuda y Schermezal (el guitarrista, anteriormente en Brainiac). Melodía pop que incluyen una sana dosis de rabia, o al menos locura.
Ayer, decepcionado por mi enésima oportunidad perdida (todas las entradas para ver a The Cure (que toca en ¡¡¡marzo!!!) están agotadas), decidí darle una prueba a Enon, de quienes nunca había escuchado nada, y, por ende, a The Garage.
El motivo por el que no había ido antes a los conciertos de esa sala es porque The Garage queda en el culo del mundo. Oficialmente ya no es Milán, es otra ciudad, Sesto San Giovanni. Y no quería verme en la situación de perder el último metro y quedarme ahí parado hasta las 6 de la mañana, o caminar casi dos horas con el frío que hace ahora acá.
O, en el peor de los casos, salirme antes del concierto y haber pagado X euros por gusto.
Pero ayer fuí. Y todo salió bien (aunque mal restrospectivamente, más detalles luego).
Resulta que los conciertos que se organizan en el local son gratis. Gratis. Solamente tienes que sacar la tarjeta de socio (que cuesta 5 euros por un año) y voila, conciertos gratis.
Eso significa (y Amadeo me va a odiar por esto) que podría haber visto a The Future of the Left... gratis.
Pero bueno, como dice un grande, "ya lo pasado, pasado". A lo mejor en enero y febrero puedo ver algún grupo que valga la pena.
(Por lo pronto me perderé a las Plasticines el 20, porque tengo que tomar el avión para pasar Navidad en Barcelona).
¿Qué tal el concierto? A mí me gustó mucho. No sabía nada de Enon, pero en estos tiempos del conocimiento instantáneo solo tienes que buscar en Wikipedia y You Tube para tener todos los datos que necesitas. Y cualquier reseña/descripción que contenga las palabras ruido y melodía ya tiene ganada la mitad de mi atención.
Las canciones (al menos las que tocaron, he visto en You Tube que a veces hacen cosas completamente diferentes) están ancladas en la base rítmica (Toko Yasuda toca increíblemente bien el bajo), mientras que la guitarra toca ráfagas de ruido procesadas.
Si bien en algunas canciones se les notaba la deuda con el punk old-school (más bien el indie ochentero), lo que más destacó fueron las preciosas melodías vocales de Yasuda y Schermezal (el guitarrista, anteriormente en Brainiac). Melodía pop que incluyen una sana dosis de rabia, o al menos locura.
1 comment:
aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah!!!!
te odioooooooooo!!!!
jajajajajajja
enon la rompe, su disco "high society" es uno de mis favoritos de los 00. ademas brainiac esta muy bien tambien!!
abrazo, vieja. siga disfrutando!
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